La verdad, me sorprende con alegría que tanta gente anime para que este blog no se estanque y por eso, tengo un sentimiento de abandono con todos ellos y más que me turba y me perturba.
La cuestión es que a finales de diciembre se terminó de grabar el programilla para el que trabajo y hasta la reincorporación, decidí tomarme unas vacaciones momentaneas "en general". De trabajo, de sociabilidad, del blog.
El problema es que trabajar en la tele es super chachi piruli. Así que lo que fué un "nos vemos el 8 de Enero" se transformó en que nadie llamaba para reincorporarnos al trabajo... y al final, nos hemos visto el 5 de Febrero. Sí, amigos, un mes comido con patatas, con lo que se pueda sacar del paro (si se tiene) o de los ahorros (ahorros de un guionista Bwa-ha-ha-ha!!). Así que, un mes sedentario, por huevos.
Y es que en esta profesión, puede pasarte esto (y de hecho pasa a menudo) y luego tienes que volver haciendo como si nada. Es decir, te quedas un mes entero (o más) esperando para un trabajo y luego nadie tiene por qué pedirte perdón, disculpas o compensaciones. ¡No paha ná!
Justo el mismo día que terminábamos la anterior temporada recibí una oferta de un programa, pero prefería esperar a quien me esperaba a mi: la tercera temporada.
Justo el mismo día que empezaba, tardando, esta tercera temporada, recibí una "oferta" (más o menos) de otro programa en Valencia, junto a gente que quiero mucho.
Me había comprometido con este programa. De hecho, sigo haciéndolo. Pero por mi cabeza pasó la tentación de mandarles a la mierda y volverme a Valencia. Sí, vale, hay temas personales que influyen mucho en ese "arrebato", de hecho, eran la base fundamental. Pero también estaba esa sensación de "Pufff... hasta cuando". O "Cuando será la próxima".
Y es que algo que me angustia de sobremanera en este mundo es esa sensación de la que ya hemos hablado mil veces los guionistas (y en general, mucha gente de la tele) de que un día curras y el otro, estás en la calle o esperando. Lo primero duele. Lo segundo, jode. Porque rechazar ofertas o no mover currículum aguantando como un tonto, es duro. Mucho debe merecer la pena la oferta. Por ahora esta lo merece, por eso estoy aquí. Espero que en Junio, cuando acabe de hacerse esta tercera temporada, me den la razón. Si no, creo que será un punto de inflexión bastante profundo en mi vida y mi carrera.
No, no pienso dejar la profesión.
Sólo pienso que igual debo dejar de ser tan "amoldado".
Ya me entienden.
Por cierto. Este mes que he pasado en Valencia también ha tenido su parte positiva. Por supuesto, en el ámbito personal. Y mucho. Ha sido un mes especial y novedoso en mi vida, sentido, vivido y especial, en los momentos difíciles y los preciosos. Ha acabado de una manera preciosa. Me alegro y no me arrepiento nada de lo vivido, por esto, precisamente. Así que, gracias a Dios, no hay mal que por bien no venga. Y gracias a un corazón, ha sido un mes genial.
Pero no tendrán tanta suerte la próxima vez, estos malditos productores!!
Así que si quieren conservar a sus guionistas, arriésguense por ellos, igual que ellos se arriesgan con ustedes!!!
Porque si el programa se va a la mierda, nos vamos a la mierda todos, eso está claro.
6 comentarios:
¡Welcome back!
Yo suelo trabajar en casa, pero la continuidad también es un tema inquietante, y siempre están las grandes preguntas, "¿Por cuánto?" y "¿Para qué?" yo la verdad es que en el por cuánto no soy muy exigente, pero el para qué, trabajando en desarrollo de proyectos, suele tener una respuesta la mar de decepcionante. Es curiosa la mezcla de vocación que parecemos compartir todos y que siempre surja la pregunta antes o después, "¿Lo mando todo a tomar por saco?", porque si dices "No, no voy a dejar la profesión", es que lo habrás pensado, no? Yo no lo voy a dejar, pero sí tengo claro que mi prioridad es ser feliz, todo lo feliz que pueda.
i que balencia engancha!!! hes lo que tiene la terreta.
nosotras cada bez que bolbemos (tamvien emos tenido nuestro mesecito en casa) nos replanteamos nuestro futuro pofesional. ainnns... si ej que en ningun sitio te yaman "perla" como en el mercat central. che.
vesis
En primer lugar, querido, bienvenido al universo bloguero de nuevo, se te echaba de menos. Yo te había quitado de mis links ante la frustración de picharte, con perdón, y encontrar el abandono... sniff, sniff, pero corro a linkearte de nuevo).
Ey, gracias por seguir pasando por aquí.
Sí, la verdad es que lo he tenido un poquillo abandonado, a ver si le sigo dando vidilla.
Nos vemos en la blogosfera!
Angela, tienes toda la razón. Mi prioridad es también ser feliz, por eso la duda. Tengo claro que soy feliz haciendo lo que me gusta y lo que me gusta es este trabajo. Pero claro, una cosa es hacerlo por gusto y otra cuando ves que se aprovechan y no mola. Eso en cuanto a curro.
El problema es cuando esa "felicidad" interrumpe otra completa, por circunstancias, que entonces entran las dudas. Vamos, cuando la situación laboral se te mete en la personal. Puf, ya me he enrollado...
Ruvis! Toda la razón, la terreta engancha. Ese sol y tantas cosas... Pero en mi caso, también ciertos habitantes de la misma :P
MisJulie! Cada vez que leo tu nombre me acuerdo de una canción de los Diablos. Gracias por mantener mi link! Y tu también, actualiza!! :P
Ya, sé perfectamente cómo te sientes, y la verdad es que es un palo... es más diría que soy una experta en ese tema. Así que desde la solidaridad te digo: Ánimo y aguanta.
Ey, gracias!
Aun así, he puesto un nuevo post más buenrollista, que este me ha quedado llorón :P
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