Este fin de semana me he dedicado a
recorrer Madrid paseando con mi reproductor de
MP3 (no, no es uno de esos taaaan pijos... al mio hasta le falta la tapa de las pilas) y me he dado cuenta de lo importante que es una banda sonora en la vida.
Me sorprendía a mi mismo poniéndole a mi situación actual música, canciones que podían expresar mis sentimientos, ánimos y emociones mejor que palabras, diálogos o explicaciones extrañas.
La música puede ser un buen acompañamiento, pero también un buen apunte del personaje o la situación dentro de la historia. Este fin de semana tenía muchísimas ganas de llamar a gente y ponerle canciones. De pasear poniendo canciones a mi estado de ánimo. Este fin de semana, yo tenía banda sonora.
Esa banda sonora, era por otra parte nada original: Jorge Drexler y sus "12 Segundos de Oscuridad", por una parte, y The Divine Comedy, con un variadillo, por otra. Recomiendo ambos encarecidamente. ¿Y la vuestra cual ha sido?
No es el lugar este para ir contando según que cosas, si hago el apunte es por traerlo por las bandas sonoras, así que sólo diré que ya ven, me ha dado por la vena melómana y sentimental. ¡Tiempos que corren! Pero saldrán bien, saldrán bien. Ya están saliendo...
¡Que sí!
Poco a poco.
Y muy bien, seguro.