La semana pasada vi un montón de películas...
Hay veces que, aunque lo intente, no logro encontrar un sólo momento para ir rebajando esa montaña de DVDs que cada mañana me observan desde los estantes de mi habitación. Son un montón de películas que, medio compulsivamente, compro en sitios tipo FNAC o Media Market aprovechando su bajo precio y mi interés por los títulos.
Todo empezó el jueves, cuando, armado de valor y tres horas libres, me dispuse a ver "Hasta que llegó su hora" (Once Upon a Time in the West), de Sergio Leone. La disfruté como suelo disfrutar los westerns de Serio Leone, pero con ese "algo más" que tiene este peliculón de, como dice el director, "hombres y mujeres con pelotas". Me dió la testosterona poética, qué le vamos a hacer.
Hay veces que, aunque lo intente, no logro encontrar un sólo momento para ir rebajando esa montaña de DVDs que cada mañana me observan desde los estantes de mi habitación. Son un montón de películas que, medio compulsivamente, compro en sitios tipo FNAC o Media Market aprovechando su bajo precio y mi interés por los títulos.
Todo empezó el jueves, cuando, armado de valor y tres horas libres, me dispuse a ver "Hasta que llegó su hora" (Once Upon a Time in the West), de Sergio Leone. La disfruté como suelo disfrutar los westerns de Serio Leone, pero con ese "algo más" que tiene este peliculón de, como dice el director, "hombres y mujeres con pelotas". Me dió la testosterona poética, qué le vamos a hacer.
En la película el final es, como siempre, de muerte y "heroe" alejándose a caballo. Sólo que este "heroe" no era tal. Era la muerte en persona. Y el final no era sólo el de la película. Era el de una época, el de una era. El de unos hombres. Una raza, que diría Leone.
Después cogí un autobús a Bilbao y allí me ofrecieron otras dos películas. "La Última Fortaleza", con Robert Redford (lo siento, no recuerdo al director ni al guionista) y "Deuda de Sangre", con (y por) Clint Eastwood.
Después cogí un autobús a Bilbao y allí me ofrecieron otras dos películas. "La Última Fortaleza", con Robert Redford (lo siento, no recuerdo al director ni al guionista) y "Deuda de Sangre", con (y por) Clint Eastwood.
La primera ("La última Fortaleza") era una mezcla de géneros: carcelario y militar. Más testosterona militarufa pero aquí sí, con un heroe con mayúsculas (en arquetipo). Vale. Aquí también vemos morir a un tipo de hombres que ya no quedan.
La segunda ("Deuda de Sangre") , película de detective al borde del retiro que debe descubrir el caso de su vida, un asesino en serie con mensajes tipo "El Enigma" en los cómics de Batman. Al final, como siempre, mil pistas falsas llevan a (de potra) una correcta y se precipita el final donde el malo muere por malo. Me esperaba más de Clint.
A la vuelta me obsequiaron con "Spiderman" (aquí sí hay heroe) y con una desconocida (por mi) película: "La Versión Browning" (De Mike Figgis). El director ya no era desconocido (Leaving Las Vegas, Después de una noche). La película trata de un severo profesor de lenguas muertas en un colegio-internado británico que se da cuenta de que ha fracasado en su intento. Y punto.
El sábado alquilamos una película de Jim Jarmusch, "Flores Rotas", que trata de la vida de un personaje interpretado por Bill Murray que recibe una carta en la que se le comunica que tiene un hijo de 19 años de alguna de sus múltiples conquistas a lo largo de su vida. Y se replantea su vida. Su fracaso. Y punto.
Diréis, qué pesado el tío este que nos cuenta sus películas. Pues sí. Pero es que me han llamado la atención estas dos últimas que os he contado. Historias de dos fracasos, humanos, cercanos, reconocibles, pero que no encuentran solución en la película. No hay un malo. No hay un heroe. No hay un final felíz, ni un final triste, ni malo. No hay un final, directamente. Porque apelan a la identificación. Porque son personas e historias que, realmente, considero cercanas. Y porque no tiene por qué haberlo. El final lo ponemos nosotros. O no existe un final... porque no todas las historias lo tienen. El guionista ha elegido ese fragmento de esa macro-historia porque es lo necesario para transmitir su idea y punto.
No descubro nada nuevo, pero me atrae mucho este cine en el que no hay que empeñarse en la puñetera secuencia de resolución final de la película, a veces tramposa, en la que el espectador puede decidir si le ha gustado o no. Es tu final. Y a veces me descubro pensando ¿ha acabado bien? ¿ha acabado mal? ¿y ahora qué?. Y me encanta.
Sí, día denso... ya habrá más ligereza en próximos posts, qué le vamos a hacer!
12 comentarios:
Entiendo que te parezcan cercanos los personajes perdedores. Yo, por fortuna, no tengo esa suerte y esas historias sin buenos, ni malos, ni giros, ni secuencia final apoteósica... ni historia, me parecen una mierda. Quiero decir, me gustan las historias que, como tú dices, son un fragmento de la vida, sin más, una pincelada. Pero para mi 90 minutos (O más) de pincelada son muchos.
Que gran corto habría sido Lost In Translation!! Pero que rollazo de película!!
Ey, lo de "entiendo que te parezcan cercanos los personajes perededores" ha sonado muy mal.. ¡Maldito! ¡Aclara esa frase inmediatamente!
Y de paso la de "Yo, por fortuna, no tengo esa suerte" que vamos, te has lucido! :-P
Y sí, soy de los que les gustó mucho Lost In Traslation. Pero porque no todo en el cine es la historia si no cómo la describes y la cuentas. Además de que la historia, por sencilla, es bastante identificable.
No sé que director dijo una frase que me gusta mucho, seguro que tú sabes quien fue. Era algo así como: "Si un espectador va a regalarte una hora y media de su vida en escuchar lo que tú tienes que contarle, lo menor que podemos hacer es intentar no aburrirlos"
Evidentemente todos los directores parten del punto de vista de que lo que cuentan es entretenido pero creo que muchos intentan disfrazar su falta de ideas por "algo cotidiano" Y encima lo suelen hacer con unas pretensiones que echan para atrás. Si una peli está llena de silencios, de planos lentos, de miradas quebradas... no es un rollazo, es que es profunda. Pues no. Recuerdo ver en el cine "A Japanese History" y envidié al chino que se muere. Ese es un terreno que sólo los mejores pueden pisar, y si salen airosos es porque cuentan historias que, al menos en algún punto, no son nada cotidianas.
"Las tortugas también vuelan" es una buena película cotidiana, pero no sólo porque es real, también porque ahora, meses y meses después de haberla visto, aún recuerdo con cariño a Satélite, el prota, o al niño que llora todo el rato, o a la chica que quiere deshacerse de "el bebé". Lo cotidiano por el simple hecho de ser cotidiano no sirve.
Ah, y las frases del anterior post... Creo que las has entendido bien. X-D
Yo, por fortuna, no tengo esa suerte... de pensar así.
No, a ver. Estoy de acuerdo con lo que dices. Hay mil películas como las que comentas y son pocas las que permiten ese ejercicio de estética y contención saliendo airosas. Pero bueno, ¡todos pueden concursar!.
No se, para mi es igual que un fin de semana en el que he quedado para jugar un partido, ir con los amigos de cañas, salir un rato, montarme una fiesta o ver apasionantes competiciones deportivas o, por otro lado, ir a un lugar precioso y contemplarlo, sentarme y pensar en cosas que no he tenido tiempo para pensar por culpa de mil historias aparentemente complejas que me pasan. No se si me explico...
Pero sin duda llego a la conclusión de que a ver qué día quedamos, leñe!
Lo siento -Stop- he visto tu foto de Thor -Stop- verse después de eso es imposible -stop-
Pero tíiiiiiiioooo!!!
:-D
A ver si en unos meses vuelvo a vivir en mi casa y, esta vez de un modo un poco más decente que la última vez, charlamos y nos echamos unos partidillos de fútbol en la Play. Así (quizá) tenga alguna posibilidad de vencer el Valencia al CAPEÓN DE LIGA!
Un abraaaazoorl...
P.D: He visto tu "pograma" está bastante bien, la verdad. Muy buenos los monólogos.
¿De verdad trabajas ahí el autor del chiste: "piso Piloto"?
Anda que... Que descubrimiento tu fotoblog!
P.D: He visto tu "pograma" está bastante bien, la verdad. Muy buenos los monólogos.
¿De verdad trabajas ahí el autor del chiste: "piso Piloto"?
Anda que... Que descubrimiento tu fotoblog!
Maldito gusano!!
:P
"Piso Piloto" es un chiste casi nostálgico... yo iba al instituto... era joven...
Qué buena es Broken Flowers.
LiT como corto habría sido un fracaso. No habrían cabido los mil trescientos silencios incómodos, ni las tropecientas miradas, ni naranjas. No habría tenido nigún sentido. El tiempo es fundamental en la peli.
Vamos, se habría quedado en una mera anécdota sin interés.
Pero en fin, bueno, vaya, qué más da.
No se si la habras visto pero 21 gramos me encanto.Segun tu estado emocional puedes ver buenos,malos,ganadores y perdedores o simplemente entenderlo como un sartenazo a la conciencia.
Un poco de vidilla, ¿no?
Ale, exprime esa media neurona y mueve un poco el cotarro...
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