jueves, 25 de noviembre de 2004

Reencarne de mi carne

Bueno, perdonen la demora, aquí estamos de nuevo tras la tormenta laboral (aunque queda txirimiri de ese...)

Para volver, que mejor tema que el de la reencarnación.



Y es que, ya saben, a mi me apasionan los temas paranormales. Ya hice un post hace unos meses (creo recordar que en Julio) sobre fenómenos extraños pero no hice referencia a este tema tan maravilloso.

La teoría parte de un hecho simple pero luego puede complicarse lo que uno desee. El hecho simple: Uno muere y vuelve a nacer. Para complicarlo ya se puede añadir que si depende de tu vida la reencarnación es en una u otra cosa, que se puede reencarnar en objetos y animales, que sólo los puros lo hacen, que tenemos un número de vidas limitadas para llegar a la perfección, que nos acordamos o no de esas vidas anteriores...

La religión budista, por ejemplo, predica la existencia de la reencarnación. De ahí la consabida historia de el Dalai Lama que va reencarnándose por ahí y que descubren mediante extraños rituales. Tampoco soy un experto en el tema (ni lo pretendo), pero bueno, es una manera de observar la vida y perderle miedo a la muerte, pensar en que no vamos a la nada, no nos perdemos en el tiempo, si no que continuaremos nuestro viaje en otra carcasa. Al fin y al cabo, en eso consiste la religión. Esa es su meta, normalmente. Luego está la cosa de que evidentemente la población de la tierra, de humanos, no es estable. Crece (o decrece, cuando la peste, por ejemplo) y a saber de donde salen las nuevas almas o a donde irán las que sobran. Ahí cada "religión" tiene sus teorías, claro.


"¿Os creíais que sólo había arte "religioso" en las iglesias?"

Pero a mi lo que me chifla es la gente que asegura que ha tenido una vida anterior. Esta gente siempre ha estado ahí. Siempre ha habido gente que viene a decir "yo en una vida anterior debía ser..." y ahí mete cualquier cosa que tenga algo de vinculación con lo que en ese momento le parezca apasionante. Por ejemplo: Terency Moix, seguro que más de uno piensa (y él mismo pensaba) que anteriormente fué egipcio. Le apasionaba esa cultura milenaria. Pero yo quiero hablar de los que lo dicen con convicción, de los que lo asumen, de los que lo presumen y que además son capaces de ir a televisión a contarlo.

En esta gente hay una serie de puntos que me parecen importantes:

1 - Todos los que dicen haber tenido otra vida la han tenido siendo gente importante. Generales, emperadores, patricios, sacerdotes, soldados, caballeros, princesas, reinas, escritores, científicos... Vamos, que nadie ha sido esclavo, campesino, lacayo, bufón, siervo, mayordomo, pobre, muerto de hambre o tonto del pueblo. No, ellos han sido ¡importantes!. Es curioso, porque si existe la teoría de la reencarnación y teniendo en cuenta que hasta hoy en día en la pirámide social los que ocupan los estamentos de "importantes" son el 10-15%, la probabilidad de ser en el pasado alguien importante es muy muy remota. Eso por hablar de lo que pasaba en los países desarrollados. Que en los otros, también había almas y aunque se fuera de la "altas esferas" se era un Don Nadie en proporción. Esto de que los "reencarnados" hayan sido en su vida anterior gente importante o de prestigio, además, suele venir acompañado de que en la vida actual son unos completos imbéciles.

2- Normalmente, son gente que ha vivido a ser posible en periodos históricos de fácil comprensión. Vamos, los que se estudian en la EGB. "Yo he sido un general romano" "Yo he sido un sacerdote egipcio" "Yo he sido Napoleón". Nadie ha sido nunca, por ejemplo, un jefe tribal de la estepa rusa o un jefe maorí de la polinesia, o un caudillo sajón, no... Son todos jefes de cosas facilonas. No vayamos a joderla cuando preguntan "¿y qué recuerdas de allí?". Cuando se hace esa pregunta pues uno recuerda... lo que puede. Que soy un general romano, ¡pues el coliseo!. Un egipcio... ¡Las pirámides!. Pero jamás se acuerdan de cosas que sólo arqueólogos o historiadores conozcan, no. Ni que conozca gente mínimamente interesada. Sólo se acuerdan de pastiches recogidos de las películas sobre el tema. Si les dejas hablar sobre el periodo en el que vivieron dan vergüenza ajena.

3- Ya he comentado que normalmente los "renacidos" suelen ser no muy avispados. Vamos, que la mayoría de iluminados deseosos de contar sus increibles aventuras son bastante tontos. Pero bueno, eso es una noticia buena: ¡¡Todos los tontos tienen segundas oportunidades!! Viva, viva y bien.

4- Normalmente la gente que dice haber tenido otras vidas suele hacerlo para hacerse interesante. Va a programas de "regresión" para "sacar" esa otra vida, la comenta, cree que así es más interesante... Pero lo que logran es todo lo contrario. Casi deseas que mueran para ver si sale algo más interesante en la próxima tirada.

5- No se dan cuenta de lo peligroso de su momento en la reencarnación. Si aplicamos la teoría de que según tu vida te reencarnas en algo peor o mejor, teniendo en cuenta como lleves tu vida... A ver, si anteriormente has sido un general romano, pongamos por caso y ahora eres un mindundi que me cuenta que ha sido un general romano... macho, lo siguiente es ser una piedra o un caracol. Tu verás.


"En cambio, este animal está tranquilo porque sabe que por lo menos tiene 7 vidas"

En fin. Que a mi lo de la reencarnación no me acaba. Yo no se cómo acabaremos en esta vida, la verdad. Pero lo que sí se es que prefiero vivirla a demostrar lo patética que es mi vida imaginando vidas pasadas para encontrar algo donde sustentar la actual.

Ahora, si la reencarnación es cierta, después de lo que he escrito me va a tocar como mínimo ser un guante de latex en la consulta de un urólogo, o algo peor. Ya verán...

1 comentario:

Anónimo dijo...

Pues a mi, después de decir lo que he dicho de los religiosos homosexuales, creo que seré el otro guante de latex de la mano izquierda,,,,,ejjejejjejjeejj

allí nos veremos,,,fale?,,,,ejejjeje

un saludo