martes, 11 de enero de 2005

Retorno

Escribo este post para pedirles disculpas por la desatención.

Y es que, aunque parezca mentira, he podido disfrutar de unas vacaciones. Pero claro, no lo he avisado. De ahí las disculpas.

Las vacaciones se producen porque el miércoles día 5 la televisión para la que trabajo ha decidido que no se va a emitir el programa, por lo que podemos tomarnos 1 semana libre. Es la primera que tengo después de los 15 días de agosto (Y estos los primeros desde el año anterior). Y es que en esta profesión lo de las vacaciones es un concepto muy frágil. Los contratos son por obra y no suelen dejar que uno coja vacaciones en el periodo de duración. Al final, cuando uno acaba, tiene días de vacaciones, pero claro, debe usarlos para ir buscando otro trabajo antes de que estos acaben o abocarse al paro. Así que una semanita y en estas fechas pues se agradece.

Sirva este comentario para todos aquellos que piensen: "¡Qué divertido trabajar en televisión!" o el de "Se debe cobrar muy bien". Pues sí, pero en esta vida nadie da nada gratis y todo es para supuestamente compensar carencias.

La cruda realidad es esa. El trabajo es temporal en el 90% de los casos, tu futuro jamás está asegurado y vales lo que vales en el momento. Si te quedas parado, te pierdes, volver a entrar en la rueda es muy difícil. Por eso "tomarse unas vacaciones" suele ser pasar una época tirando de ahorros o del paro y muy pocos pueden permitírselo. Quizá los que cobren algún tipo de Royalties o los que sepan que en determinada fecha tienen un contrato seguro y un proyecto en el que están incluidos. Pero eso en televisión es muy muy difícil.

Al final el resultado es que jamás sabes qué va a ser de ti el mes siguiente. Primero porque no sabes si el programa renovará, si os quitarán de la parrilla mañana mismo (os juro que pasa, de un día a otro, fuera), si seguirá años y años, si te llamarán para trabajar en otra ciudad, si tendrás posibilidad de cogerte un par de días en tal mes o si precisamente esos días el trabajo será terrible... si tendrás dinero o estarás en el paro... Incertidumbre.

Es por esto que en cuanto se puede, se intenta estar bien atado o pluriempleado, con varios proyectos o trabajos, a veces sin relación. Uno interesante, a mi parecer, es el de la docencia. Alternar el horario de clases con la escritura de proyectos de guión y demás no debe ser muy complicado y supone una salida a 2 necesidades: escritura y estabilidad económica. Habrá que mover ficha por ahí, que ya hace tiempo que las dejé quitetas por aquello de intentar mover primero la faceta artística. Ya veremos.

Ah, por cierto, París muy bonita. Unos días geniales en genial compañía paseando por esa ciudad increíble por la que debo volver en cuanto pueda. Tendrá que ser un fin de semana, me temo.

P.D: Por cierto, y ya que últimamente estoy hablando mucho de guiones, hago mención al blog de mi compañero de curro y sufridor: La Caja Lista que está interesante para ver más opiniones sobre el mundillo y problemas diarios.

1 comentario:

Anónimo dijo...

pues soy escritor y guionista español, con algunas cosillas literarias publicadas y otros cortos trabajados en video, y es de interés que escribas con tu experiencia. Yo, desde Córdoba, poca oferta recibo y mucha menos puedo atender; no obstante, sigo en ello, y ver que el mercado está mal para todos no sé si es mejor o peor de lo que pensaba... Gracias por publicar estas líneas, y se agradecería que anunciaras también el dónde acudir y cuándo, pero eso creo que ya es pedir demasiado para la primera vez que redacto aquí, ¿no?
Joaquín.